El frío afecta también a los aparatos eléctricos y a todo tipo de máquinas. Por ello, los ascensores tampoco son inmunes a las bajas temperaturas.
¿Quieres saber más sobre este tema? Pues hoy en Ascensores Pertor os lo contamos todo.
¿Cómo influye el frío en tu ascensor?
Una de las principales consecuencias que tiene el frío en los ascensores es que afecta a todas esas partes que tienen que estar lubricadas con grasa o aceite para garantizar el correcto funcionamiento de la máquina.
Es decir, si el frío hace que estas partes se solidifique o se resequen pueden provocar averías en las piezas como el sistema de freno, las poleas, las cerraduras o la central hidráulica, entre otras.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que dependiendo del tipo de ascensor el frío afectará a éste de diferente manera. Por ello, los ascensores “menos resistentes” a la bajada de las temperaturas son los de tipo hidráulico.
Los ascensores hidráulicos se mueven gracias a que una central hidráulica, que tiene aceite para impulsar al pistón, es la encargada de empujar la cabina hacia arriba o abajo. Por ello, tal y como hemos visto anteriormente este aceite puede resecarse o solidificarse y hacer que el pistón se mueva de manera más lenta.